Los tres pilares de una cura detox

El día a día ya nos pone suficientes trabas para que nuestra alimentación y estilo de vida no sean tan correctos como debieran. Maltratamos el organismo consumiendo alimentos poco saludables y sin cumplir con la recomendación tantas veces realizada por los expertos de incorporar un poco de ejercicio como parte de nuestra rutina. Tal vez detrás de todo esto se escondan muchos de los síntomas que padecemos:insomnio, estrés, dolores de cabeza, articulares, mala circulación, etcétera.

Quizás incluso seamos conscientes de cada error y señalemos la falta de tiempo o de fuerza de voluntad como factores decisivos para poder llevar esa vida idílica que logre el equilibrio perfecto entre cuerpo y mente y que, a buen seguro, mejoraría sustancialmente nuestro futuro en lo que a salud se refiere.

Ahí es donde entra en juego la cura detox. Más que una dieta es un concepto de vida, una serie de principios basados en los beneficios conocidos de la medicina china y también de la dieta mediterránea, que a su vez se fundamenta en un estilo de vida equilibrado y sano.

Todos esos conocimientos se pueden aplicar en una cura que ayude a depurar de modo natural nuestro organismo, recuperando el máximo grado de bienestar físico y mental.

No se trata de hacer dietas milagro, ni de adelgazar, ni siquiera de hacerlo en tiempo récord. Tampoco de sumarse a una moda pasajera. Se trata de entender que nuestro cuerpo es una máquina que debe recibir los alimentos apropiados.

Una cura detoxinante debe estar basada en tres pilares.

1. Nutrición

El uso de alimentos ecológicos y de temporada es fundamental para esta cura que se basa además en la limitación de ciertos alimentos de sobra conocidos por sus propiedades nocivas para el organismo.

Azúcares refinados, sal, grasas, alcohol y café, deben ser sustituidos por endulzantes naturales como la estevia, el jarabe de ágave, la panela o incluso la miel natural. La hora del café será la hora de las infusiones, el té verde, el café de cebada o de higos, y la leche vegetal sin azúcar, mejor de arroz, almendras, avena o soja.

Debemos atrevernos con productos nuevos en nuestra dieta. Los cereales como el trigo sarraceno, mijo, arroz, maíz, legumbres como la quinoa, hierbas aromáticas y especias (cúrcuma, canela, cardamomo) pueden ser una buena opción para darles a nuestros platos un nuevo punto de sabor y un plus de alimentos saludables.

2. Deporte

El ejercicio es fundamental en nuestra vida cotidiana. Una asignatura algo pendiente que merece un esfuerzo si queremos realizar ese cambio que propone la cura detox.

Debemos practicar alguna actividad deportiva acorde a nuestro objetivo y complexión a ser posible siempre con una indicación médica o dirigida por especialistas. Yoga, pilates, estiramiento de meridianos o reeducación postural son algunas disciplinas deportivas recomendadas por los especialistas para acompañar y trabajar el equilibrio de cuerpo y mente. El Watsu, técnica de relajación en el agua, es una buena alternativa para la consecución de una desconexión total.

3. Bioenergía

Para completar un tratamiento debemos incorporar algunos rituales o tratamientos bioenergéticos que nos ayudarán a detoxinar, regenerar y tonificar. El drenaje linfático facial y corporal contribuye a eliminar impurezas, descongestiona nuestros capilares superficiales y estimula la oxigenación. La electroestimulación por su parte nos permite desbloquear puntos de bloqueo energético favoreciendo la tonificación de los tejidos.

No olvidemos la aromacosmética con los beneficios de los aceites esenciales que nos proporcionan un bienestar psicofísico tanto por inhalación como por su aplicación en productos cosméticos.

Sea con pequeños cambios que vayamos incorporando desde nuestra dieta y hábitos o con la ayuda de profesionales está claro que con la cura detox nuestra salud saldrá ganando.

Fuente: http://www.dmedicina.com/vida-sana/alimentacion/nutricion/2015/12/19/tres-pilares-cura-detox-97418.html